FICHA
Título: Campus de la Justicia Madrid
Ubicación:Madrid, España
Año:2007
Programa:Edificio Contencioso-Administrativo
Estado:Concurso
Equipo:Josean Ruiz Esquiroz
Nacho Ruiz Allén
MEMORIA
Campus Justicia
Tiempo Abstracto. Nuestra propuesta para el edificio de lo contencioso-administrativo en el Campus de la Justicia de Madrid asume la condición circular el edificio para resolver con claridad su distribución interior, su complejo programa y su coherencia constructiva y estructural. Desde un punto de vista urbano, la multiplicación de edificios iconográficos a su alrededor, nos ha hecho resolver su presencia de una manera serena, casi enigmática. La piel sigue la geometría circular, con un leve escalonamiento en cada planta, a la manera de un zigurat invertido. Se forma de esta manera un porche circular en planta baja, que resuelve el acceso desde el camino peatonal del campus. La piel exterior está formada por un sistema de lamas triangulares orientables, que giran sobre su propio baricentro, ofreciendo la posibilidad de marcar la fecha y hora, de captar sol en las zonas expuestas, y de emitir luz durante la noche. El edificio se convierte en un reloj para el campus, una cronotope que marca ese “tiempo abstracto” que en nuestra civilización hemos convenido en utilizar.
Tiempo estructurador. La distribución de un programa complejo dentro de un esquema concéntrico necesita mecanismos de orientación. Se plantea un sistema de notación que toma como referencia la división horaria de una circunferencia, en la que la hora 12 coincide exactamente con el norte y los restantes puntos cardinales están representados por las horas 3, 6 y 9.
Tiempo natural. El patio interior debe su forma a la carta solar del lugar exacto en el que se enclava el edificio (40º29´04´´N 3º36´39´´O), con el objetivo de ofrecer la mayor superficie posible al soleamiento. Una doble piel de vidrio hace las veces de acumulador térmico en invierno y chimenea solar en verano. Sobre la piel de vidrio se coloca una red de tensores de acero inoxidable donde crecerán plantas trepadoras caducifolias, convirtiendo el patio en un jardín interior. En este lugar, la relación con el tiempo será perceptiva, sin cuantificar, con constancia “real” de su existencia.